Una de carretera

Desde que tenemos bici de carretera, nos va dando por ir subiendo los puertos de montaña y subidas míticas  de nuestro querido país y de los limítrofes. Poco a poco los vamos haciendo, todavía nos faltan muchos pero este fin de semana han caído 2 mas, puerto Bernedo o La Aldea y Herrera.

Pero como no sabíamos muy bien como llegar hasta Herrera, que era nuestro objetivo real, dimos una pequeña vuelta.

Quedamos Luisma y yo a las 7.15 en el parking de pabellón Araba y sin mas miramientos dirigimos nuestras primeras miradas hacia Agurain y puerto Opakua. Algún ojo también se nos escapaba hacia el cielo. Para la tranquilidad de algunos, llevábamos chubasquero.

El puerto Opakua ya es conocido y cada uno a su ritmo llegamos a la cima con una bonita niebla. Sin más descanso que para sacar una foto al cartel ponemos rumbo a Santa Cruz de Campezo. Pasando en un bonito descenso por Contrasta, Ullibarri Arana, Alda, San Vicente Arana, Oteo y Orbiso.

Una vez en Campezo, cogemos dirección Genevilla y sin prisa pero sin pausa vamos haciendo km. Antes de llegar a Cabredo tenemos un pequeño puertillo que subimos tranquilamente dándole a la sin hueso. Desde Cabredo a Marañón  y desde aquí a Bernedo pasando por el barranco que desemboca en Angostina que es un preciosidad.

¡¡¡¡ Pues ya estamos en Bernedo ¡!!!!!!!. ¿Y que toca ahora? Pues subir el puerto Bernedo. Luisma no lo había subido nunca y yo desde el 2001, así que como no lo conocíamos poco a poco vamos subiéndolo. No es exigente pero si constante.

Una vez en la cima, la foto al cartel y  seguimos la carretera que nos lleva a Meano y de aquí a Kripan y Elvillar. Todo esto es nuevo para nosotros y vamos con mucho tiento porque en cualquier momento nos encontramos alguna trampa que no teníamos prevista.

Pero no, hasta Elvillar podemos decir que es cuesta abajo. Aquí paramos a repostar agua y poco a poco vamos llegando al objetivo del día Herrera, pero todavía tenemos que llegar a Laguardia.

Y desde Elvillar a Laguardia es un festival de toboganes que parece que no, pero nos van haciendo pupita a las piernas.

Desde Laguardia hasta el sanatorio de Leza vamos tranquilos y viendo por donde asciende el objetivo del día. Llevamos 100 km en las patas y por lo menos yo empiezo a notar su presencia.

Empezamos el puerto y como siempre, cada uno a su ritmo.  Es un puerto exigente desde el primer metro. Al inicio pone 14% y la cosa se pone tiesa desde el principio. Incluso en una curva de de herradura que hay me hizo un caballito la bici. Las piernas notan los km e incluso noto que algunos cables quieren tensarse. Quitando la vista de la carretera y viendo el paisaje de la Rioja Alavesa parece que la cosa es más liviana. Por fin llego al balcón y poco después a la cima. Llego bastante tocado de patas y todavía nos queda llegar hasta Ventas de Armentia y subir el puerto Vitoria.  Mas fotos, unos estiramientos un poco de gasoil al cuerpo y para abajo

Me tiro para Peñacerrada donde he quedado con Luisma. El descenso lo hago muy tranquilo para ir recuperando. Ya en Peñacerrada, unos estiramientos, un poco mas de  comida y bebida y enseguida llega Luisma que tampoco trae cara de muchos amigos.

Comentando lo que nos queda,  decidimos mas por obligación que por devoción, ir tranquilos. Teníamos respeto al trozo desde Peñacerrada hasta Ventas y sin darnos cuenta nos presentamos en Ventas y lo primero que dijimos fue que lo habíamos pasado bastante mejor de lo pensado.

Ahora solo nos queda subir el puerto Vitoria y nuestro objetivo estaba cumplido. Así que sin más miramientos que al cielo porque empezaba a llover un poco subimos la ultima tachuela del día.

Al otro lado del puerto  los buitres ya están dando vueltas y oliendo  la carroña de dos txirrindularis que van mas que con lo justo, pero conseguimos llegar a Gasteiz, eso si, bastante castigados.

Han sido 138 km, 6.36 horas de bici y casi 3000 mts de acumulado.

Como casi siempre se nos queda ese buen sabor boca de haber hecho bien las cosas y con la mente pensando en la próxima a realizar.

Así que, aunque muy cansados, pero muy contentos llegamos al parking del pabellón Araba y nos despedimos hasta la próxima

Luisma, como siempre, un placer pedalear contigo.

Arrieros somos……

Fotos:


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