La noche del viernes 27 fue la prevista para esta pedalada nocturna, sobre las 19:30 nos fuimos reuniendo poco a poco en el lugar de inicio, Elorriaga.
Saludos, risas y muchas bridas para sujetar los focos que a última hora se deberían colocar en las bicicletas.
Foto de inicio y a las bicicletas, iniciamos las primeras pedaladas por Salburua, la gente que paseaba por allí se quedaban atónitos al ver semejante cuadrilla de bicicleteros, así como los ciervos del parque, y eso que aún no habíamos encendido los focos.
Pasamos por Zurbano donde Ekaitz nos estaba esperando, y si ahora si los focos empiezan a iluminar la parcelaria que nos lleva hasta Lubiano donde hacemos una paradita.
Seguimos hasta el embalse lo bordeamos por el GR 38 y por la Vía Verde hasta las inmediaciones de los caseríos de Urizar. En este tramo parece ser que apareció un cérvido que debió flipar con la luminosidades de los Betigora y no podía saltar una cerca hasta de Josetxu le alentó con una palmada en el lomo.
Se sube la cima de Urizar y seguimos por el GR 38 hacia Arbulo, alguna caída sin consecuencias y mucho polvo tragado por los últimos del grupo.
Llegamos a Matauco donde una cuadrilla cenaba a la luz de la espléndida noche y nos jalean muy entusiasmados.
Pasamos por Zerio y paralelos a las vías del tren ya nos dirigimos a cerrar el círculo de esta bonita ruta.
Al llegar a Elorriaga Luisma ya nos había hecho los brasas donde nuestra Reina Madre nos realizó una vez su buen hacer con unas exquisitas txistorras, morcillas y costilla.
¡Hasta la próxima Nocturna!
Fotos:
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