KM: 103,8
TIEMPO: 5:54
V/M: 16,9
VMAX: 52,6
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VMAX: 52,6
Hoy hemos cambiado los planes. Primero hemos andando un poco, no mucho tampoco, y luego hemos desayunado en Los Santos de Maimona. Desde aquí hasta Merida hemos ido como autenticos tiros por unas pistas que parecen autopistas y además con tendencia a bajar. Pasando por Villafranca de Barros, Almendralejos. Desde Villafranca hasta casi Almendralejos, hemos ido entre viñedos. Es una zona de buenos caldos.
A las 14.00 estábamos en Merida. Hubiéramos llegado antes si a 3 km de Merida, Miguelito no se hubiera metido por un camino de barro arcilloso que no podía ni mover la bici. Hemos tenido que bajar a ayudarle porque no se podía ni mover.
En Merida, hemos comido en la plaza del ayuntamiento y el bar donde hemos cogido las bebidas eran de Orduña. Tras el café, una vuelta rápida por Merida alguna foto y a afrontar los últimos 40 km.
En el embalse de Proserpina nos ha caído la primera txaparrada. Nos hemos cobijado debajo de un árbol y cuando ha pasado, hemos seguido. Primero rodeando el pantano y luego por una carretera hasta El Carrascalejo y de aquí por una buena pista hasta Aljucen.
Entramos en el Parque Natural de Cornalvo. El firme ha cambiado. Ha pasado de ser un todo uno a tierra roja, que por un momento nos ha recordado a la que se había metido Miguel al mediodía. Pero no, era bastante mejor.
El postre del día ha sido la segunda txaparrada que nos ha caído a 10 Km de Alcuescar, con aparato eléctrico y todo. Hemos llegado bastante mojados a Alcuescar.
Este recorrido lo hicimos hace 10 años y el comentario de los tres es, que ha cambiado mogollón. No nos acordamos de nada. Los caminos ahora son pistas. Hay mucho peregrino, la mayoría extranjeros, y muchos Albergues. Vamos, que esto está en auge
Como ya teníamos reservado el albergue, nos hemos instalado, secado, duchado y montado el cambalache para que se seque la ropa.
Como estamos a 3 km del pueblo, nos hemos ido andando para allí recuperar líquidos y sólidos. Después de hacer estas dos cositas hemos vuelto en taxi porque caen auténticas trompas de agua. Aquí les llaman "mareas de abril", lo que pasa es que este año vienen con retraso.
Por fin hemos comido migas. Llevamos desde que hemos empezado con ganas de comerlas y hoy nos hemos dado el gusto.
Y ahora desde la cama y esperando que lo malo que anuncian el tiempo para mañana sea tan malo como hoy, me despido hasta mañana.
A las 14.00 estábamos en Merida. Hubiéramos llegado antes si a 3 km de Merida, Miguelito no se hubiera metido por un camino de barro arcilloso que no podía ni mover la bici. Hemos tenido que bajar a ayudarle porque no se podía ni mover.
En Merida, hemos comido en la plaza del ayuntamiento y el bar donde hemos cogido las bebidas eran de Orduña. Tras el café, una vuelta rápida por Merida alguna foto y a afrontar los últimos 40 km.
En el embalse de Proserpina nos ha caído la primera txaparrada. Nos hemos cobijado debajo de un árbol y cuando ha pasado, hemos seguido. Primero rodeando el pantano y luego por una carretera hasta El Carrascalejo y de aquí por una buena pista hasta Aljucen.
Entramos en el Parque Natural de Cornalvo. El firme ha cambiado. Ha pasado de ser un todo uno a tierra roja, que por un momento nos ha recordado a la que se había metido Miguel al mediodía. Pero no, era bastante mejor.
El postre del día ha sido la segunda txaparrada que nos ha caído a 10 Km de Alcuescar, con aparato eléctrico y todo. Hemos llegado bastante mojados a Alcuescar.
Este recorrido lo hicimos hace 10 años y el comentario de los tres es, que ha cambiado mogollón. No nos acordamos de nada. Los caminos ahora son pistas. Hay mucho peregrino, la mayoría extranjeros, y muchos Albergues. Vamos, que esto está en auge
Como ya teníamos reservado el albergue, nos hemos instalado, secado, duchado y montado el cambalache para que se seque la ropa.
Como estamos a 3 km del pueblo, nos hemos ido andando para allí recuperar líquidos y sólidos. Después de hacer estas dos cositas hemos vuelto en taxi porque caen auténticas trompas de agua. Aquí les llaman "mareas de abril", lo que pasa es que este año vienen con retraso.
Por fin hemos comido migas. Llevamos desde que hemos empezado con ganas de comerlas y hoy nos hemos dado el gusto.
Y ahora desde la cama y esperando que lo malo que anuncian el tiempo para mañana sea tan malo como hoy, me despido hasta mañana.
Arrieritos somos.
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