Saltoki Xperiences Cycling 2016

Mis Datos:
Distancia: 60,3Km
D acumulado: +1745mts
Tiempo: 4h37m
Vmax: 84 Km/h
Vmed.: 14,8 Km/h
　

Esta aventura empieza el viernes por la tarde viajando hasta el valle del Roncal para pasar un fin de semana divertido y entretenido.

Una vez en el Roncal nos reunimos José Luis, Vidal, Miguel Ángel que fue desde vitoria en bici y yo (Raúl).

Después de saludos y esas cosas empezamos con la primera reparación del fin de semana toca cambiar la cubierta trasera de Miguel que la tiene en las lonas y no voy a comentar nada de esa pedazo de bomba que nos sacó, que también tuvimos que montar bien. Terminada la faena nos acercamos a por los dorsales y cenar. Café, txupito y para la cama que el sábado hay que madrugar.


Quedamos el sábado a las 8:45 para ir hacia El Roncal. Una vez en la salida nos cruzamos con Miguel Indurain, que era el encargado del corte de la cinta, y con los AC\DC de fondo nos dan la salida.

Que se puede decir de la ruta. Salimos del centro de El Roncal, la gente nos anima y poco a poco dejamos el pueblo y empezamos a subir. Subir, subir y más subir, con alguna bajada muy rápida y entretenía. Seguimos haciendo kilómetros hasta que una piedra acaba con la válvula trasera de Vidal que empieza a perder aire y no hay forma de pararla. Así que toca trabajar un poco y poner la camara, nos alcanza José Luis y al ver que no nos hace falta ayuda sigue el camino confiado de que le alcanzamos. Llega el coche de asistencia, que casualmente no tenía cámaras de 29" de válvula fina, y nos deja una bomba para que la estrenemos. Terminamos la reparación y con todo ya en orden continuamos la ruta.

Algo más adelante nos juntamos con José Luis, qué hacemos unas risas y le dejamos atrás. Ya estamos cerca del primer avituallamiento y el día empeora por momentos, llueve y hace frío. Después de unos 20 km. subiendo y alguna bajada llegamos al avituallamiento donde se nos vuelve a unir José Luis. Comemos y bebemos para coger fuerzas y poder seguir esta locura de ruta, nos abrigamos que ahora toca un tramo de unos 20 km. de bajada y llaneo por carretera al tener que cambiar la organización la ruta por la climatología tan mala.

20 kilómetros rápidos con mucha agua y mucho frío que me pasan factura. Las piernas empiezan a quedarse duras por el frío y el agua, cada vez me planteo más hacer la ruta corta y no sufrir más. Vidal coje rueda de un carretero y tira con el para volver a entrar en calor. Yo lo intento pero no responden las piernas así que desisto y pongo un ritmo alto. Llegamos al punto en el que se separan las 2 rutas.

A 2 kilómetros tenemos las ducha con agua calentita, o podemos seguir con la ruta larga. 8 kilómetros de cronoescalada muy duros. Pues ya sabéis lo que decido. Irme para la ducha y dejar de sufrir. Cojo la bici y pienso, para qué cojones hemos venido hasta aquí, pues para sufrir. Y enfilamos hacia la cronoescalada, eso sí, antes paramos en el último avituallamiento. Comemos un poco, mucho líquido y algún gel para preparar lo que nos espera. Pues hay estamos los tres valientes José Luis, Vidal y yo. Enfilamos la subida, pasamos por el pórtico y se inicia el tiempo de la cronoescalada.

Metemos el plato de postre y vamos jugando con los piñones. Los 2 o 3 kilómetros se hacen casi bien, pero todavía queda mucho para coronar y los kilómetros y el frío siguen pasando factura. Llegan los rampones y los piñones suben y el porcentaje también sube. Intentas subir mas piñones pero ya está todo metido y en ese momento te das cuenta que vas a sufrir y mucho.

Tratas de no pensar y mucho menos levantar la cabeza para no ver lo que te queda. Pero como nos gusta sufrir miras y ves que hay una curva y parece que llega un llano para que entre algo de sangre en las piernas, llegas a esa curva y la cosa empeora. Más subida, paso los kilómetros como buenamente puedo. Doy pedales por inercia y de repente veo una cara conocida, el bueno de Vidal baja para hacer de gregario y me acompaña el último kilómetro y medio marcando la cadencia y dando apoyo. Gracias tío, lo estaba pasando realmente mal. Coronamos y termina la cronoescalada, reponemos líquidos, otro gel y cambiamos la batería a la cámara para grabar la bajada. Bajada muy rápida y peligrosa con algún susto incluido. Hacemos algunos kilómetros más y llegamos a meta situada en El Roncal. Cervecita para recuperar líquido y llevamos las bicis al lavadero que rápidamente las dejan perfectas y seguido al parking vigilado.

Para terminar ducha, masaje para relajar después de una ruta dura y a comer.

　

Vamos, que hemos pasado un fin de semana perfecto. Buena compañía y una organización inmejorable.

Fotos:
https://goo.gl/photos/jfrYVZfzGfMdfxZK8

Video:
https://youtu.be/XpNHiUxzQeI